El partido comenzó pronto poniendose muy cuesta arriba para el Inter. Sneijder aplaudió irónicamente una decisión arbitral en la que Beckham no recibió tarjeta tras protagonizar una dura entrada. Esta burla le costó al jugador holandés la roja en el minuto 25 de partido. Más adelante sería Lucio el quesería expulsado por doble amarilla tras recibir la última por bloquear con la mano un tiro de Huntelaar dentro del área. El lanzamiento fue efectuado por Ronaldinho, sin embargo, Julio César adivinó el lanzamiento y detuvo a su compatriota. Ronaldinho hizo un partido bastante gris, practicamente como todo el Milán.Los goles llegaron por medio de Diego Milito, posiblemente el mejor jugador del partido, que batió por bajo a Dida de un potente disparo cruzado en el minuto 10. El tanto que cerraría el marcador fue efectuado por Pandev, jugaro que había errado un par de ocasiones muy claras a lo largo del partido. Sin embargo, en el minuto 65, efectuó un preciso lanzamiento de falta que se coló a en la red de un Dida que no tuvo su día.
Finalizado el encuentro, el Inter comenzó a celebrar la victoria donde se coló un invitado inesperado. Silvio Berlusconi también se unió al festejo o, mejor dicho, su cara. ¿Cómo es posible? El veterano defensa Materazzi saltó al campo con una careta del presidente del Milán y se unió a la celebración de sus compañeros. Una anécdota que dará que hablar.De esta forma, los neroazzurros ponen aún más distancia en la clasificación entre ellos y el Milán, segundo en el campeonato. Nueve puntos separan ahora a los dos equipos aunque el Milán tiene un partido menos. Serio golpe de autoridad en el Calcio por parte del Inter que ha dejado claro su mensaje de que no cederá estado de campeón de Italia.
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