La última jornada de la Liga de Campeones nos deja un protagonista que no ha brillado precisamente por su gran acierto. Sander Boschker, el veterano guardameta del Twente, concedió ayer ante el Tottenham uno de los goles más estúpidos de su carrera. El portero de 40 años lleva 20 defendiendo la camiseta del equipo holandés en los que ha logrado la sorprendente cifra de 500 partidos oficiales con el Twente. También ha sido el más veterano en debutar con la selección orange (39 años).
En el encuentro de la Champions que enfrentaba a su equipo frente a los Spurs, Wingerhof cedió al guardameta cuando un desafortunado bote hizo que fallara en su despeje no golpeando al balón, que terminó introduciendose en la portería holandesa.
Un desafortunado incidente para un veterano portero que ya ha dejado su sello en esta edición de la Liga de Campeones.
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